Dos veces, una ayer y otra hoy, que he estado a puntito de dar con mi culo gordo en el suelo, suerte ayer de mi cuidadora y esta mañana del T.F. ya que al ponerme en pie para que me cambien de la silla de baño a la de ruedas, mis piernas no han aguantado.
Otro día más que me quedo a medio día en la cama.
Y hoy será el segundo día que tengo que pedirle a la cuidadora, que venga tres horas más por la tarde, porque necesito hidratarme continuamente (beber agua muy a menudo) y acostado no puedo beber (me ahogaría) y no puedo alejar a mi madre de sus telenovelas. Entonces también aprovecho para que me haga muchas movilizaciones para intentar recuperar (si se puede) lo que he perdido estos días, que por desgracia para mí es mucho.
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