Uno sobra

Negación, ira, negociación, depresión y aceptación. Son las cinco fases por las que, según el modelo redactado en 1969 por la doctora Elisabeth Kübler-Ross, pasan los pacientes a quienes se les ha diagnosticado una enfermedad terminal. Esto luego se ha aplicado a las enfermedades incurables, a las pérdidas de seres queridos, catástrofes y todo aquello similar. Algunas mínimas y tímidas discrepancias surgieron al citado modelo de Kübler-Ross. Pero es aceptado por casi todos "psicos" y médicos.

Yo me voy a limitar a comentar como paciente, enfermo y afectado de E.M. enfermedad degenerativa e incurable (parece), únicamente la aceptación:

No acepto la enfermedad. Negarla no la niego, pero aceptarla: JAMÁS DE LOS "JAMASES". Aceptar la E.M. para mi, es resignarse a tenerla. Es someterse a ella. Es claudicar ante ella. No la quiero conmigo. Como decían en las pelis del Oeste: Uno de los dos sobra en este pueblo, forastero.

Hoy en un correo a otra afectada le he escrito: Mi opinión es, que si aceptas la enfermedad, ya no te libras de ello.

Todos pensaréis: Muy bien en tu teoría, pero en la práctica: Te quedas con ella.

Yo sigo pensando que volveré a mi vida normal, y por ello, a pesar de todo, lucho. Un día quiero hacer un audio sobre "el poder de nuestra mente". OjO, no pretendo nada más que verter mis propias opiniones en este BLOG.

Hasta mañanita.