Faltan 211 días.
Hoy a las ocho y media de la mañana ya estaba en la butaca. Gracias a una pareja de auxiliares latinos que si comprenden ellos que tanta cama me perjudica. Gracias y espero que otras sigan el ejemplo.
Desayuno:
-Dos quesitos.
-Dos zumos de naranja.
Por la mañana es un no parar de hacer pis con el seguril. Luego todo vuelve a su cauce.
Recibo llamadas de pacientes, familiares de pacientes y personal del Pere Virgili y a todos les extraña el que no haga rehabilitación. Espero que entre esta semana y la próxima se normalice todo.
Este lunes a las diez y media de la mañana, tiene una entrevista mi familia con la trabajadora social. Ya contaré.
Comida:
-Canelones.
-Colita de rape a la marinera con mejillones, almejas y gambitas.
-Mini ensalada.
-Rodaja de melón.
Una tontería, o no. En el Pere Virgili no había día que no me manchase la camiseta con la comida o cena, aquí pocas veces. ¿Motivo? aquí, las salsas tienen más textura, son menos líquidas. Yo sigo siendo igual de patoso o manoso.
Merienda:
-Zumo de melocotón.
Cena:
-Crema de verduras.
-Hamburguesa de pollo.
-Vitalínea.
Mañana domingo, aquí seguiré
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